Koyaanisqatsi

Koyaanisqatsi

Koyaanisqatsi-Life out of balance es un documental dirigido por Godfrey Reggio, con música de Philip Glass y fotografía de Ron Fricke. Se rodó en Estados Unidos entre los años 1975 y 1982, y estrenada este año en el Radio City Wall de Nueva York.

Este film narra sin voz, solo con fotografías y música, el impacto de la sociedad occidental en el medio ambiente. Las primeras imágenes son de elementos naturales, como olas, montañas y nubes. 

Luego pasa a la imagen de una fábrica, justo al lado de una playa. A medida que pasa el documental las imágenes son cada vez más rápidas y caóticas. Muestra la vida de las grandes urbes estadounidenses  a través del movimiento de sus coches y de su gente, tanto de día como de noche. 

Se ve perfectamente que es un sistema insostenible que explota pequeñas porciones de terreno para alimentar a un número desproporcionado de personas. Además, la gran cantidad de vehículos en estas urbes se traduce en toneladas de dióxido de carbono y polución expulsadas a la atmósfera, además de la transformación del medio a través de las carreteras (aparecen imágenes de las famosas autopistas de Los Ángeles que se han convertido en un icono de la ciudad).

Intenta concienciar de que debemos cambiar algo o no habrá planeta en el que vivir y de que debemos cambiar el modo de vida. Hay muchos fotogramas que muestran el movimiento de la gente en las calles, los centros comerciales y el metro. Muestra nuestra insignificancia en medio de la masa y la gran presión a la que estamos sometidos, vamos siempre corriendo a todas partes.

¿No sería mejor intentar ir más despacio de vez en cuando y pararnos a mirar lo que hay a nuestro alrededor? Probar a ir andando por la vida en lugar de patinando, sin darnos cuenta de por dónde vamos.

Este documental me ha hecho reflexionar y me ha impactado. Las imágenes de los trabajadores de las fábricas me han hecho un nudo en el pecho. Sé que es necesario para mantener la sociedad en la que vivimos, pero quizá deberíamos plantearnos cambiar algo para evitar que unos vivan cómodos a costa de otros.

Lo más triste es que desde 1982, el año de su estreno hace más de 30 años, no ha cambiado apenas nada, lo que nos hace plantearnos si hay realmente evolución. Incluso ha empeorado gracias a las empresas tecnológicas.

Creo que este documental es necesario verlo para todos los públicos, para concienciar y darnos cuenta de que las generaciones actuales somos las que tenemos la responsabilidad (y el deber ) de cambiar todo esto ¿Lo conseguiremos?

Nota : 7-10